Cada vez tenemos más presente la
importancia de cuidarse, medimos más nuestros hábitos y buscamos una vida “healthy”.
Esta tendencia se aplica de igual forma al cuidado de nuestra piel, el cual a
veces se ve reñido con el ritmo de vida que llevamos.
El estrés, la mala
alimentación y otros hábitos influyen negativamente en el aspecto de la dermis.
Hoy queremos compartir con
vosotros unos consejos para poder aliviar dichos efectos en nuestra piel y que
esta luzca radiante.
1.- Mantener la piel hidrata:
Todos sabemos su importancia, pero pocos lo llevan a la práctica en su día a
día. A pesar de lo que se pueda pensar en invierno nuestro cutis se deshidrata
mucho, por lo que es recomendable aplicarnos cremas más grasas que en otras
épocas.
2.- No ducharnos con agua
excesivamente caliente: Por mucho que nos apetezca refugiarnos del frío invernal
bajo agua bien calentita, es una
práctica que se ha de evitar porque puede producir irritaciones y sequedad.
3.- A veces la prevención no es suficiente
y la piel se daña, ocasionando heridas en forma de cortes o llagas. En estos
casos es importante tratarla cuanto antes primero con agua y jabón, después con
alguna crema o producto que reduzca la sequedad.
Estas son las principales
acciones que tenemos que llevar a cabo para mantener nuestra piel cuidada en
invierno. De todas formas siempre recomendamos acudir a un dermatólogo con
frecuencia, ya que puede detectar problemas que requieren de cuidados más exhaustivos
para mantener la piel saludable.
No duda en acudir al centro dermatológico Dr. Fulgencio Muñoz, que cuenta con una larga carrera
profesional y con amplia experiencia solucionando problemas dermatológicos.
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